No te sintás decepcionado si rechazaron tu solicitud de préstamo. ¡Podés cambiar las cosas!
Sé positivo y tratá de enfocar tus esfuerzos en descubrir las razones para poder trabajar en ellas.
En algún momento de nuestra vida, desafortunadamente, todos hemos tenido que recibir malas noticias y es normal que nos sintamos decepcionados.
Algunas personas se ponen tristes o se enfadan, pero otras ven estos momentos como una oportunidad.
Ya sabés, como dice el viejo dicho:
“Al mal tiempo, buena cara.”
Qué hacer si no aprobaron tu solicitud de préstamo
Para empezar, comenzá a construir un historial crediticio positivo para prevenir o corregir cualquier historial pasado que te haya perjudicado.
Antes de pedir un préstamo otra vez deberías tener en cuenta algunos consejos:
Volvé a evaluar tu salud financiera en general
Es una oportunidad para tomar un descanso y revisar tu historial de crédito pasado para encontrar dónde podría estar el problema.
Tal vez no tengas un mal historial de crédito y simplemente sólo tienes que pagar otras deudas antes de tomar una nueva.
Ajustá tus expectativas
Debés ser consecuente y coherente: no trates de pedir cantidades que no seas capaz de pagar.
Aunque tengas muy buenos planes para el futuro, tomá en cuenta que los prestamistas se preocupan más del presente.
Si descubrís que estás en la lista de morosos, intentá salir del Veraz para aumentar tus posibilidades de conseguir un préstamo.
Cambiá algunos datos
Pueden ser la cantidad, el tipo de préstamo o los períodos de tiempo.
Quizás, en vez de pedir un préstamo pequeño y caro como un microcrédito, podés intentar con un préstamo más grande y con menos intereses (pero ofreciendo una garantía como ser un inmueble o persona garante).
Si en cambio rechazaron tu solicitud de préstamo a largo plazo, podés intentar con un préstamo a corto plazo donde los requisitos son más flexibles.
Leé la letra pequeña
Revisá cuidadosamente los términos y condiciones de cada prestamista, tal vez estás pasando algo por alto o enviaste algún documento de forma incorrecta.
Preguntá por la razón de la denegación
Asegurate de recibir una respuesta específica para que podás trabajar en los detalles en el futuro.
No siempre darán la razón verdadera, pero vale la pena intentarlo.
¡Hacé tu presupuesto!
Tras recibir una negativa a un préstamo, es el momento ideal para mirar en detalle tus finanzas personales.
Hacer un presupuesto puede ayudarte a acomodar tu economía aún sin recibir un préstamo, evitando gastos innecesarios.
Aunque Robin siempre está a tu lado y quiere que consigas tu préstamo, Robin no te puede asegurar que te lo aprobarán.
Si seguís estos consejos aumentarán las posibilidades de que tu préstamo sea aprobado.
A partir de ahí, ¡serás vos y solamente vos el responsable de hacer que las cosas sucedan!
Recordá, con un enfoque planificado, ¡podés obtener fácilmente un préstamo en tu próximo intento!