Continuamente solemos oír hablar de la inflación y como afecta nuestras finanzas personales sin saber realmente lo que significan. Por eso hemos decidido explicarte de forma clara y sencilla todo lo referente a esta variable macroeconómica que tiene tanta incidencia sobre nuestras vidas.
La inflación, en pocas palabras, es el aumento generalizado de los precios en los bienes y servicios presentes en una economía. Esta variable suele medir el incremento de los precios en un periodo de tiempo determinado, generalmente de un año.
Existen 3 tipos principales de inflación. El primero es la inflación moderada, esa que no supera el 10%, lo que ocasiona que los precios suban de forma gradual y más orgánica. La inflación galopante es otro tipo, con este tipo de variable los precios suelen subir dos o tres veces por año, afectando considerablemente el poder adquisitivo de las personas. Por último está la hiperinflación que suele ser adjudicada a una grave crisis económica donde el valor de los precios supera el 1000%.
Efecto positivos y negativos de la inflación
La inflación tiene varios efectos sobre las finanzas de las personas e instituciones, a continuación mencionaremos los más comunes:
- Efecto sobre los precios:
la inflación sobre los costos de los bienes y servicios se puede ver generada por una disparidad entre la oferta y la demanda de determinado producto; lo que ocasiona que los comerciantes aumenten los precios para evitar que se agote la existencia. Los costos también puede aumentar debido al incremento de los precios de las materias primas, procesos de producción, etc. - Depreciación de la moneda:
Cuando hay una inflación galopante o una hiperinflación, la moneda de un país se devalúa. Esto se debe a que las personas con el mismo dinero que ganaban un año atrás ya no pueden costear los productos y servicios a los precios actuales. - Los salarios aumentan:
Para combatir la inflación, los gobiernos suelen subir los sueldos para que las personas recobren su poder adquisitivo. Esto puede no ser provechoso para los trabajadores con sueldo fijo, los pensionados o los desempleados. - Los préstamos bajan su precio real:
Uno de los aspectos medianamente positivos del aumento de la inflación es que los préstamos bancarios o los microcréditos se vuelven más provechosos para las personas. Eso se debe a que al no haber un reajuste de los intereses, los pagos suelen ser más asequibles para quienes soliciten un crédito personal. Esto no es bueno para las empresas de préstamos porque el dinero que reciben en cuotas tiende a estar devaluado. Cabe destacar que los préstamos personales en tiempos de inflación están al alcance de unos pocos, porque el poder adquisitivo disminuye.